Día Internacional del Circo | Plaza Terminal Goes

El Jueves 6 de Octubre de 15 a 21 hs acercate a la Plaza Terminal Goes para formar parte del festejo por el Día Internacional del Circo. Organiza la Red de Artistas Circenses del Uruguay.

Programación de Actividades

15 hs - Entrenamiento Libre y Música. 

17 hs - Juegos: Voley, Clavas, Resistencias, Gladiador, Pulpo y Carreras

18:20 hs -  Freestyle

19 hs -  Varieté : 5 números presentadores

20:30 hs -  Conversatorio con RACU (Red de Artistas Circenses del Uruguay)

 

Cada 6 de octubre se festeja el Día Nacional del Circo. Se celebra en homenaje a José "Pepe" Podestá, artista nacido en 1858 en Montevideo, Uruguay, y personaje central para la historia del circo y teatro nacionales.

Pepe Podestá fue un acróbata y actor pionero en varios aspectos. Por un lado, creó a su personaje “Pepino el 88”, payaso modelo del cómico rioplatense que fusionaba la figura del payaso con la del payador, cantando canciones rimadas sobre temas nacionales de actualidad e incorporando la crítica social desde el humor. Por otro lado, fue el creador de lo que hoy llamamos "circo criollo": un modelo de espectáculo circense original surgido en el país a fines del siglo XIX.

El circo criollo está basado en la unión, en un mismo espectáculo, de diversas técnicas circenses –malabares, acrobacias, habilidades ecuestres, parodias– presentadas en una primera parte, junto a una segunda en la que se exhiben piezas teatrales de género gauchesco. El nacimiento de esta innovadora modalidad de performance se atribuye a la presentación, primero como pantomima (1884) y luego como drama hablado (1886), de Juan Moreira, de Eduardo Gutiérrez, en versión de José Podestá. Juan Moreira, novela publicada en forma de folletín entre 1879 y 1880, fue una de las obras centrales del criollismo popular argentino, que plasmó la imagen del gaucho rebelde y justiciero.

Si la literatura fue la cuna de origen del personaje gauchesco, el circo fue el ámbito donde se propagó su éxito. Y el éxito no solo se debió a la fuerte identificación que los espectadores generaban con el héroe justiciero sino también a las peculiaridades de la modalidad de actuación teatral iniciada en el Circo Criollo. La mezcla entre comicidad circense y drama popular con una fuerte presencia de la corporalidad en escena es lo que marca el nacimiento del circo criollo como germen del “teatro nacional”.

Los recursos expresivos utilizados en las actuaciones de este género artístico popular implicaron una fuerte apuesta al realismo de las escenas, que, como lo recuerda el propio José Podestá en sus Memorias involucraba:

“que allí mismo se enciende el fuego y se coloca un asador con su cordero; por allí, por delante de los espectadores, husmeando la carne que se asa, pasean los perros que van a los ranchos y a las pulperías criollas y que son lo que el agua para los patos, indispensable” (Podestá, 1930).

Fuente: Julieta Infantino, doctora en Antropología, Investigadora adjunta del CONICET - Universidad de Buenos Aires.